lunes, 28 de abril de 2014


Voy a construir un puente,
entre tus ojos y los mios...
Voy a asfaltar el camino,
entre mi corazón y el tuyo,
con estrellas luminosas
que alumbre nuestro destino.
Y recogeré las gotas de rocío
para formarte un arco iris,
solo para esa tu mirada...
solo para tu amor y el mio.

Y dices que ya no escribo
palabras encadenadas,
con sentido, sin sentido...
letras sacadas del alma.

Que el cantar de las aves
anidando en mi ventana,
ya no suenan como antaño,
ni a despertar de madrugadas.

Ya no toco aquellas notas
en mi piano desafinado,
que es el ansia de la vida...
lo que a poco se va agotando.

Que el tiempo va pasando,
y aquel corazón emborrado,
triste, viejo y cansado...
descansa en sueños pasados.

Ya mi pluma no escribe
palabras encadenadas...
ya mis manos no tocan,
algunas notas desafinadas.

José Luís Rivero 14/04/2014

Búscame en el tiempo,
en momentos del pasado,
en aquella niñez perdida,
en recuerdos ya borrados.

Búscame en tu mente,
si aun no has olvidado,
aquellos juegos de antaño,
de inocencia de hermanos...

Y si no logras recordarme,
por el tiempo ya pasado,
busca dentro de tu alma,
o en algún rincón apartado.

Porque yo seguiré llevando,
el mapa de aquel tesoro,
que dibujamos cuando niños,
que compartimos como hermanos.

José Luís Rivero 22/04/14

Cansado del largo camino
sinuoso y algo angosto,
entre senderos solitarios...
caminando va un ermitaño.
Solo le guía un farol,
que alumbra sus soledades,
sus sueños que desde antaño
va buscando por los parajes.
Cansado de un camino largo,
fatigado por esta su vida,
va caminando el ermitaño,
sufriendo de melancolías...
En el descanso de su destino,
bajo la luz que le ilumina,
de aquel viejo farol oxidado.
como estrella de luz divina,
mira al Cielo buscando
su sola y única compañía...
y con estrofas rebuscadas,
le dedica mil y una poesía:
“ Que eres mi luna bella
la que de noche a mi me guía,
me guardas todos mis sueños,
hasta que amanezca el día...
que soy un pobre ermitaño,
trovador de soledades...
y tu mi lunita bella...
el cantar de mis cantares.”

José Luis Rivero 22/04/2014



Quedan tras de ti
puertas abiertas,
en tu triste despedida
de un viaje sin vuelta.

Solo basta una palabra,
hiriente cual guadaña,
que sesga tu vida,
que entierra tu alma.

Quedan tras de ti,
aquel futuro soñado,
aquellos días vividos,
recuerdos del pasado.

Para decir adiós,
solo basta esa palabra,
asesina de la vida...
sepulturera del alma.

Y tras de ti queda,
rasgos de alegre sonrisa,
tras tu puerta cerrada...
de contenidas lágrimas,
de aquella vida soñada.

José Luís Rivero 28/04/2014